Una noche a lo Kill Bill
El otro día estuve pasando una noche a lo Kill Bill, no, no me refiero a agarrar una katana y liarla, no… estuve cenando en el restaurante que inspiró el que sale en la película, que está ubicado en Tokyo. Corresponde a una cadena de restaurantes llamada Gonpachi, concretamente el de Nishi-Azabu, cerquita de Roppongi.
Fuimos andando desde la estación de Roppongi en la línea Hibiya de metro y luego andamos como 10-15 minutos. Llegamos a la entrada, justo en una esquina y, como hacía muy buena noche, había mucha gente en la terraza tomando una cerveza.
El local por dentro tiene el aspecto del típico izakaya japonés, con las dos plantas tal y como se vé en Kill Bill, pero el salón, en vez de tener un espacio diáfano (dónde se desarrolla gran parte de la escena) tiene una barra principal y está lleno de mesas y sillas.
La comida no está mal, es la típica de este tipo de lugares, tempura, fideos, arroz, agemono (fritanga, vamos…), pero en relación calidad precio es más caro que la media, pero supongo que es «el precio de la fama» lo que estamos pagando. En mi opinión, puede ser un lugar curioso para escaparse una noche (sobretodo si te gusta el cine de Tarantino), pero nunca sería uno de mis habituales.