Las montañas de DanXia (丹霞山)
Una de las escapadas de fin de semana que me hice este verano durante mi estancia en China fue a las montañas de DanXia (丹霞山), un geoparque y conjunto montañoso que se encuentra en la provincia de Guangdong, la misma donde se encuentra la ciudad de Guangzhou. Así que, como nos quedaba cerca, parte del grupo de españoles que vivimos en la capital cantonesa nos acercamos a visitarlo. He aquí una foto de todo el equipo:
Como véis, yo todavía estaba con la pata chula, y fui escayolado y con la muleta (suerte que mi médico no lee el blog), pero vamos, con un poco más de esfuerzo por mi parte y un poco más de paciencia por parte de mis compañeros disfrutamos a tope el aquel viaje. Aunque nos llovió y estaba nubladete, lo agradecimos porque las caminatas que nos pegamos (a pleno sol) nos hubieran matado.
Para llegar, primero cogimos un tren desde Guangzhou hasta Shaoguan, y luego un autobús (frente a la estación de trenes) que recorrió los aproximadamente 50 kilómetros en dirección noreste que nos separaban de las puertas del geoparque (véase en GoogleMaps pulsando aquí). Una vez allí entramos y negociamos para quedarnos en uno de los alojamientos del interior del espacio natural (puede verse el alojamiento en la foto superior).
La verdad es que si tuviera que definir la estancia la definiría como «familiar al estilo rural chino», no puedo protestar por el precio que pagamos, y además se portaron genial con nosotros. Lo del rollo familiar lo digo por que, además de que los niños estaban por ahí jugando por los alrededores, hubo detalles como que pedimos pollo para la cena y nos lo mataron y cocinaron ahí mismo o que en la fiesta que nos marcamos esa noche, se acabó la coca-cola y los dueños de la casa salieron en el coche a por más… ya te digo… trato familiar al máximo.
Los caminos en general están preparados para recibir visitantes, muchos de ellos asfaltados y con escaleras en los desniveles, eso sí, algunas muy empinadas y con muy poca superficie de apoyo (no aptas para los que padezcan vértigo), de hecho, para acceder a alguno de los montes contaremos con un funicular, algo parecido a lo que ví en el Monte Hua, cerca de Xian. Durante el camino hay varios miradores que, aunque había algo de niebla, nos dejaron boquiabiertos con algunas de las vistas.
El conjunto montañoso tiene una superficie de 280 kilómetros cuadrados y es uno de los más erosionados del mundo, las diferentes montañas y grupos rocosos cobran formas de lo más diversas, algunas, como podéis ver en las fotografías, bastante curiosas. Por supuesto, estas formaciones tan caprichosas no se libran de tener sobrenombres y comentarios:
Durante el camino, también encontramos cuevas sagradas, capillas y templos. Muchos de los elementos me recordaron a detalles que Japón recibió de la cultura China. Por ejemplo este gyoban que véis en la imagen bajo estas líneas, me recuerda mucho al que ví en el templo Tomeizan Kofukuji de Nagasaki.
Para finalizar os dejo con algunas imágenes más del lugar: