Ohara y el Sanzen-in

三千院

Durante el pasado otoño, aprovechando que hacía años que no lo visitaba me pasé con una amiga por Ohara (大原), un pueblo en una zona rural del norte de Kyoto. Esta zona es especialmente popular en otoño, cuando sus árboles se tiñen de rojos y dorados (lo que se llama el Kouyou) y, aunque aún no estaba en esplendor, pude volver a recordar el por qué estas montañas son tan apreciadas por los japoneses de los alrededores.

Autumn beauty

Esta zona, además, tiene muchos templos, todos ellos de enorme belleza por su enclave privilegiado, pero sin duda alguna, el más popular es el Sanzen-in, un gran santuario del cual, aquí tenéis su ubicación en GMaps. En la actualidad, Ohara y Sanzen-in, son difíciles de concebir el uno sin el otro. En cuanto llegamos, nos dirigimos directamente a este templo, por un caminito flanqueado por tiendas con productos típicos de la zona.

Ohara shops

Las primeras hojas empezaban a cambiar su color, según ascendíamos, los árboles se vestían (aún tímidamente) de rojos y dorados. Si de alguna cosa pueden presumir los templos de la zona, es de lo cuidados que están sus jardines, si de alguna cosa puede presumir Ohara, es de la armonía entre lo construido por la mano humana y lo que ha hecho crecer la naturaleza…

Red leaves

Pronto llegamos a la entrada del Sanzen-in (三千院), que nos iría sorprendiendo edificación tras edificación, pasarela tras pasarela, jardín tras jardín… El santuario fue fundado durante el período Heian, por el célebre Dengyō Daishi, una de las figuras más importantes del budismo japonés, ya que fue el que introdujo la escuela Tiantai. Aquí tenéis parte de sus jardines y el Shinden (pabellón principal):

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Aunque, sin duda alguna, lo que más despertó nuestra atención fueron las pequeñas estatuas que aparecen entre el musgo en los jardines posteriores (las podéis ver en la imagen que encabeza este artículo y un poco más abajo en este mismo post). Sin duda alguna, este es uno de los elementos más característicos de este lugar, que además, parece agregar aún más armonía y tranquilidad a la que ya existe. Al final de nuestro camino, encontramos una sala donde pudimos tomar un té mientras observábamos la naturaleza: un lugar que parecía sacado de un cuento.

Relaxing cup of green tea

Tras finalizar nuestra visita al santuario seguimos dando una vuelta por la zona, no obstante, eso ya os lo contaré en otra ocasión. La forma más rápida de llegar hasta aquí desde Kyoto es tomar la línea Karasuma de metro hasta la última estación (Kokusaikaikan) (un trayecto de 20 minutos, que cuesta 280yenes) y después tomar el bus número 19 que te deja en Ohara (que son otros 20 minutos, y el trayecto son 340yenes, aunque solo hay un bus cada 40 minutos).

Sanzen-in

No obstante, yo suelo ir por otra vía más cómoda que es tomar el autobús 17 desde la estación de Kyoto ya que va de forma directa, también es un poco más barata (el trayecto cuesta 580 yenes), pero el trayecto dura como una hora. Además, hay un bus cada 20 minutos, por lo que las esperas tampoco suelen ser muy largas, eso sí. Para finalizar os dejo con algunas fotografías más y os recuerdo que podéis seguir mis viajes por Japón a través de mi twitter o mi instagram.

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Japanese garden at Ohara
El jardín japonés Shuhekien es uno de los
atractivos más famosos del santuario

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¡¡ BUEN FIN DE SEMANA A TODOS !!

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